Septiembre trae mochilas nuevas, reencuentros en el patio… y también un aumento en las consultas de psicología y psiquiatría infantil. Según datos de Top Doctors Group, durante los primeros meses de curso (septiembre y octubre) estas citas crecen hasta un 25% respecto al resto del año.
El motivo no siempre es el mismo: ansiedad, miedos, tristeza persistente, irritabilidad, problemas de conducta, dificultades de aprendizaje o de concentración. En cualquier caso, la vuelta a la rutina puede pesar más de lo que parece.
Adaptarse lleva tiempo (y paciencia)
Los expertos coinciden en que los niños suelen necesitar entre 2 y 4 semanas para adaptarse al nuevo curso. En ese periodo, la clave está en normalizar emociones, hablar del tema con naturalidad y darle un tono positivo.
Amistades sanas para prevenir el acoso
El regreso a las aulas también reactiva otro reto: el bullying. Según Bullying Sin Fronteras, en 2024 más de 300.000 menores sufrieron acoso o ciberacoso en España, convirtiéndose en el país europeo con más casos.
Establecer límites saludables con los compañeros, aprender a decir “no” y trabajar habilidades como la empatía, la asertividad y la resolución de conflictos ayuda a generar amistades más sanas y seguras.
6 consejos de los profesionales para cuidar la salud mental de los menores
- 👂 Escuchar y validar sus emociones, sin justificar todos los comportamientos.
- 🌱 Fomentar su independencia de forma progresiva.
- 🎯 No cargarles con expectativas o presiones sociales excesivas.
- 💪 Enseñarles a manejar la frustración y a ser resilientes.
- 🚫 Evitar la sobreprotección, que limita su desarrollo.
- 📵 Poner límites al uso de pantallas para mejorar atención, ánimo y sueño.
En resumen: volver al cole no es solo comprar uniformes o cuadernos. También es un buen momento para acompañar emocionalmente a los niños, ayudarlos a transitar la adaptación y recordarles que, aunque no todo siempre será fácil, no estarán solos en el proceso.


